lunes, 10 de mayo de 2010

Táctica de combate

Hola a todos una semana más. Hoy vamos a hablar sobre cómo afrontar los combates tanto en la sala, mientras entrenáis, como cuando estáis en torneos.


El primer aspecto a tener en cuenta, antes incluso de bajaros la careta, es saber qué esperáis sacar con el combate. Si estáis en la sala y vuestro maestro os ha dejado un rato para tirar al final de la clase, aprovechadlo para practicar lo que os han enseñado, o si estáis hasta las narices, cosa que a todos nos ha pasado, tirad para divertiros.

En cuanto a los combates en competiciones, hay que recordar un par de cosas. La primera y más importante es, que vas a hacer lo mismo que has hecho todos los días en la sala, por lo que no hay porque ponerse nervioso ni alterarse. La segunda, no hay que precipitarse en buscar los tocados, y tercera hay que creer en uno mismo, pues si el oponente puede tocar tu también puedes hacerlo y puntuar. Teniendo claras estas tres cosas, podemos decir que una competición se divide en dos fases, la Poule y las Directas.

En la poule, hay que conseguir el mayor número de tocados a favor y el mínimo en contra. Esto se consigue con acciones ganadoras, que son aquellas en las que tu te sientes más seguro y mejor te salen, de esta manera consigues más puntos.

Una vez superada la poule, si entras en las directas la cosa cambia, ya que los combates ya no son a 5 sino a 15, con lo que hay que estudiar más al adversario y pensar cómo, con el nivel que tiene cada uno, puede ganar a la persona que tiene delante. La mejor manera para ganar, es estudiar las reacciones que tiene nuestro contrincante durante el primer minuto del asalto, y luego aprovechar sus puntos débiles.

Pero recordad el consejo, siempre con frialdad, serenidad y conciencia de tus acciones.

P.D: Como me dijo una vez, un maestro mío, los combates se ganan punto a punto y trabajando y trabajando.

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